El otro dia estuve en una conferencia sobre el trabajo con las pérdidas, haciendo referencia a la pérdida de personas queridas y a personas con procesos de enfermedades crónicas (VIH, cáncer...) y en cómo se realizan estos procesos de acceptación y integración.
Se habló del método creado por la psiquiatra y médica alemana E.Kübler-Ross (1926) en el que se trabaja los procesos de duelo en terapias de grupo donde la base de este trabajo se centra en el tener un espacio para expresarse emocionalmente y recibir un acompañamiento.
El trabajo del terapeuta se sustenta con el enfoque humanista y permite así crear un entorno de libertad e igualdad donde cada uno pueda asumir y integrar sus pérdidas.
Fue curioso ver cómo este método nació de la necesidad de poder compartir los sentimientos y emociones del aquí y ahora de la persona y no sobre la muerte los conceptos o creencias que nos surjen de ella. La realidad es que eso sólo nos lleva a un pozo sin fondo, y las personas que viven este momento en el qual emerge la parte más espiritual y emocional del ser, necesitan permitirse sentir y elevarse a otro estado en el que encuentren la calma y la paz interior.
Es realmente interesante darse cuenta de que según cómo mires a la vida podrás mirar a la muerte. Desde que nacemos estamos expuestos a las pérdidas, desde la pérdida de la infancia, la pérdida de ser el primer hijo y centro de atención parental, pérdida de etapa escolar, de animales de compañía, de personas queridas, etc. y tendemos a no querer pensar ni hacernos a la idea de ello hasta que llega el momento, con lo que las resistencias a la evidencia en forma de no dirigirle la mirada sólo serán causadoras de conflictos y dificultades a a hora de integrar y asumir de forma sana las pérdidas. Y por el contario lo que vamos a hacer es ir cargando durante el proceso de vida de pérdidas no aceptadas y traumáticas en dónde las emociones han quedado recluidas con el daño que esto conlleva.
¿ Somos conscientes de cómo nos puede sanar la dirección de nuestra mirada ?
Tal y cómo decía Elisabeth Kubler-Ross "mi meta era romper con la barrera de negación profesional que prohibía a los pacientes expresar sus más íntimas preocupaciones" y para conseguir eso su vida fue de un activismo constante para poder hacer frente a la críticas y rechazos de los cientificos de la época, vida con la que curiosamente tuvo fin estando largo tiempo postrada en la cama, expresando su contemplación hacia la muerte en su último libro "Lecciones de vida".
Se habló del método creado por la psiquiatra y médica alemana E.Kübler-Ross (1926) en el que se trabaja los procesos de duelo en terapias de grupo donde la base de este trabajo se centra en el tener un espacio para expresarse emocionalmente y recibir un acompañamiento.
El trabajo del terapeuta se sustenta con el enfoque humanista y permite así crear un entorno de libertad e igualdad donde cada uno pueda asumir y integrar sus pérdidas.
Fue curioso ver cómo este método nació de la necesidad de poder compartir los sentimientos y emociones del aquí y ahora de la persona y no sobre la muerte los conceptos o creencias que nos surjen de ella. La realidad es que eso sólo nos lleva a un pozo sin fondo, y las personas que viven este momento en el qual emerge la parte más espiritual y emocional del ser, necesitan permitirse sentir y elevarse a otro estado en el que encuentren la calma y la paz interior.
Es realmente interesante darse cuenta de que según cómo mires a la vida podrás mirar a la muerte. Desde que nacemos estamos expuestos a las pérdidas, desde la pérdida de la infancia, la pérdida de ser el primer hijo y centro de atención parental, pérdida de etapa escolar, de animales de compañía, de personas queridas, etc. y tendemos a no querer pensar ni hacernos a la idea de ello hasta que llega el momento, con lo que las resistencias a la evidencia en forma de no dirigirle la mirada sólo serán causadoras de conflictos y dificultades a a hora de integrar y asumir de forma sana las pérdidas. Y por el contario lo que vamos a hacer es ir cargando durante el proceso de vida de pérdidas no aceptadas y traumáticas en dónde las emociones han quedado recluidas con el daño que esto conlleva.
¿ Somos conscientes de cómo nos puede sanar la dirección de nuestra mirada ?
Tal y cómo decía Elisabeth Kubler-Ross "mi meta era romper con la barrera de negación profesional que prohibía a los pacientes expresar sus más íntimas preocupaciones" y para conseguir eso su vida fue de un activismo constante para poder hacer frente a la críticas y rechazos de los cientificos de la época, vida con la que curiosamente tuvo fin estando largo tiempo postrada en la cama, expresando su contemplación hacia la muerte en su último libro "Lecciones de vida".
2 comentarios:
El tema de las pérdidas, el duelo y la muerte lo podíamos tratar algún día no?
M'ha semblat molt interessant el tema que has plantejat i impresionant la manera que has tingut d'expresar-lo. Crec que el tema de les pèrdues és molt important per a les persones com jo, que ens aferrem tant a les coses i que potser el cami de creixement per a nosaltres pasa per començar a viure el present en el que hi ha deixant de banda el que hi havi o el que no hi haurà. Viure el present des de l'acceptació del que ens va passant ens permetrà arribar a la mort amb aquesta mateixa serenitat.
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